Publicado el 16 marzo, 2020 por Xavier Surrá
entablar-conversacion

Cómo entablar conversaciones interesantes

El ser humano es un animal social y eso significa que estamos siempre en contacto con otras personas, con las que podemos hablar, entablar conversaciones, desde las más habituales en comercios, por pura cortesía, hasta discusiones sobre el sentido de la vida, el amor y otros temas que siempre dan para mucho. Lo que está claro que es que tener conversaciones interesantes es uno de los rasgos que mejor nos pueden definir y que harán que la consideración de los demás crezca para con nosotros. No hablamos solo de hacernos los interesantes, sino de serlo. De que cualquiera quiera estar con nosotros y tener una buena charla, para aprender más, para descubrir nuevos enfoques, para expandir su conocimiento, y nosotros con ellos.

Muchos piensan que entablar conversaciones interesantes puede servirles para ligar más, y seguramente lleven razón, pero no es el único motivo por el que deberíamos hacerlo. Las conversaciones interesantes dan una mejor imagen de nosotros mismos al resto, y nos ayudan a comprender mejor nuestra realidad. En un grupo, por ejemplo, podemos destacarnos por nuestra manera de expresarnos, nuestros puntos de vista originales o simplemente, aportando datos a la conversación que no han salido. Es una fórmula de estrechar lazos con los demás y de crear un ambiente mucho mejor. Y es que cualquier conversación, incluso las más banales, se pueden convertir en interesantes si lo queremos. Nosotros te dejamos aquí algunos consejos para que la conversación que tengas con cualquier persona sea verdaderamente interesante.

Busca puntos en común con la otra persona

chicas-hablando

Lo primero que hace una conversación interesante es que ambos estemos interesados, valga la redundancia, en lo que se está hablando. Puedes tener muchísimos conocimientos sobre kárate, por ejemplo, pero si la otra persona no muestra excesivo interés en ese tema, al final sentirás que la estás aburriendo. Por eso es mejor dominar una gran variedad de temas, para encontrar alguno en común con la otra persona, y así poder desarrollar una conversación en la que los dos podáis participar y sentiros a gusto de verdad. Debes tener cierta empatía y conocimiento de la psicología de las personas para entender ew, ofreciendo puntos de vista interesantes y mostrándote también apasionado a la hora de hablar de ese punto que os une.

Interésate por ella

Esto es una de las claves más importantes para mantener auténticas conversaciones gratificantes e interesantes, y no monólogos. Porque no hay que pensar solo en nosotros mismos y en todo lo que sabemos sobre un tema determinado, sino demostrar también que nos podemos adaptar a lo que esa otra persona esté pensando o queriendo sacar como tema. Llevarla siempre a nuestro terreno puede ser contraproducente en el sentido de que acabaremos por aburrirla y será simplemente una lucha de egos por ver quién se lleva el peso de la conversación. Interesarnos por la otra persona, por cómo piensa, por lo que le gusta y lo que quiere compartir, será la mejor manera de encontrar el tema perfecto para desarrollarlo en una conversación que nos permita conocernos más a fondo.

No solo estaremos demostrando un dominio del tema que vayamos a tratar, y así también una cultura general notable, sino también una empatía y una sensibilidad capaz de interesarse por la otra persona, recoger su testimonio y entenderlo, para que pase a formar parte de nuestros intereses. Es una habilidad social que no todos manejan, porque algunos están demasiado cegados en continuar hablando por sí mismos y con la misma retahíla de siempre, da igual quién esté delante. Si nos interesamos por la otra persona descubriremos, además, nuevas formas de entender ese tema que estamos tratando, nuevas visiones que expandirán mucho más el universo de nuestro conocimiento. Y es que se habla y se debate para aprender, no para demostrar todo lo que sabemos.

Mantente al tanto de la actualidad

pareja

Podemos hablar de los temas que siempre han interesado a la humanidad, desde la vida y la muerte hasta el amor, los celos o el rencor. Pero está claro que la mayoría de temas de conversación interesantes suelen tener que ver con la actualidad, al menos como germen. Partimos de algo que ha sucedido recientemente, y desde ahí vamos desarrollando el tema tal y como nos interese, según también las respuestas de nuestro interlocutor. Hoy en día es mucho más fácil estar al tanto de la actualidad, al menos de forma general, porque es cierto que el acceso a tantísima información está desembocando, precisamente, en la nula información real a la que llegamos, ante tal avalancha de datos.

Exprésate correctamente

No se trata solo del contenido, sino también del continente. Es decir, podemos ser las personas con más cultura general del mundo y saber sobre un montón de temas, pero si no sabemos expresarnos correctamente, si nuestra explicación  no es amena, no llega a los demás, será como tener el mejor coche del mundo y no poder conducirlo. La expresión y la forma de hablar también es muy importante a la hora de mantener una conversación, aunque haya gente que decida no darle tanta importancia a esto. Por supuesto, dejamos a un lado los insultos y las palabras malsonantes, incluso en los debates o discusiones. Ese tipo de términos no debería tener cabida en una conversación, aun cuando el tono que se utilice sea elevado.

Expresarnos correctamente significa no cometer errores al hablar y utilizar palabras correctas, de las que conocemos sus significados y entendemos perfectamente cómo utilizarlas en el contexto adecuado. Tampoco sirve de mucho utilizar un lenguaje muy recargado si la otra persona no nos entiende. El vocabulario enrevesado puede ser signo de que sabemos hablar muy bien y hemos leído mucho, pero llevado a un extremo nos hará quedar incluso peor, como si fuéramos unos esnobs. Adecuar nuestra conversación a la otra persona no va solo por los temas a tratar, sino también por la manera que tengamos de expresarnos para que se nos entienda perfectamente y la conversación sea no solo interesante, sino también provechosa.